TODOS QUEREMOS UN PRESIDENTE COMO TRUMP.
TODOS QUEREMOS UN PRESIDENTE COMO TRUMP.
Es indubitable que todos queremos un representante como Donald Tump; mi afirmación no es sarcasmo, Donald Trump, siendo un presidente electo (es decir, no tomando el cargo de Presidente de los Estados Unidos de América), comenzó gestiones para cumplir las promesas de campaña que había realizado fervientemente a su electorado.
Me atrevo a decir que no solo los estadounidenses creen que cumplirá sus promesas; el resto del mundo cree en su palabra; cuestión que cualquier representante a nivel mundial desearía. Existe una diferencia entre tener fe y creer que una persona cumplirá su promesa, el mundo cree en que Donald Trump, cumplirá sus promesas de campaña.
Donald Trump, de forma imperante prometió la construcción de un muro en la frontera sur de los Estados Unidos de América, dándole soporte con una orden ejecutiva como uno de sus primeros actos como presidente; razón que robustece mi afirmación; todos queremos un presidente como Donald Trump, un gobernante que ipso facto cumplimente sus promesas.
El hoy presidente estadounidense, con un apercibimiento de imponer cargas contributivas a una empresa del sector automovilístico; hizo que no continuara con el proyecto de una fábrica de ensamblaje que contemplaba en México. Lo anterior también fue una de sus promesas, pues de forma frecuente señalo que devolvería el trabajo a los norteamericanos.
Todos queremos un presidente como Donald Trump, alguien que de forma inmediata cumpla sus promesas; en el derecho existe una máxima jurídica, la cual es aplicable al caso en concreto facta non verba, hechos no palabras, reza de forma literal.
Es innegable que Donald Trump, ha cumplido con sus promesas en tiempo record; la fe ciega que se le tiene a líderes carismáticos, no genera que estos sean o hayan sido buenos gobernantes; un representante es elegido por lo que promete y aquel que cumple sus promesas se gana la confianza de aquellos que no votaron por él; en la inteligencia que la del electorado que sufragaron en favor suyo ya la tiene.
Sus órdenes ejecutivas son impugnables; pero la percepción del mundo es que Donald Trump cumplimenta su palabra, por eso todos queremos a un presidente como él.
Hay una larga diferencia entre ser un representante que cumpla y una buena persona, la calidad moral de los candidatos y representantes siempre es exigible pero en el particular caso de Donald Trump, su pueblo la conoce; no solo eso, todo el mundo la conoce.
Trump, no tiene carisma, tampoco tiene actos de cortesía o cualquier otra característica de convencionalismo social como su antecesor, pero Donald Trump, tiene algo que Obama nunca tuvo y eso es la confianza. Obama tenía la fe del pueblo estadounidense, pero como aduje existe un abismo entre la fe y creer. La fe se construye con una idea utópica, la creencia se construye con hechos.
Su slogan es el mismo, devolver a los estadounidenses empleo, salud y sus fronteras, hace unos días en su cuenta personal de Twitter escribió: "We will bring back our Jobs We will bring back our borders. We will bring back our wealth - and we will bring back our dreams!". Sin duda alguna todos queremos a un presidente como Trump; sus acciones pueden o no gustarnos como mexicanos, pero Donald Trump, no tiene que cumplirnos tiene que cumplirles a los que sufragaron en favor suyo. Es por todo ello, que todos queremos un presidente como Donald Trump.
Por MDAF Gerardo Juárez Rebollar.